Saturday, July 15, 2006

La soledad era esto

ES ESTÚPIDO lamentar haber encontrado lo que estabas buscando. Como cuando deseas algo tanto que puede llegar a ser peligroso el objetivo en sí. Sí, como esos horribles eslóganes de películas americanas: "ten cuidado con lo que deseas. Podrías conseguirlo". Pues lo mismo. El tema es buscar la soledad, encontrar primero compañía y después verte despojado de ella. Ése es el asunto. Ir a por Soledad y volverte compañíamaníaco. Y no debería haber mayor problema, supongo. Sin embargo, sentirse tan solo en una ciudad de 8 millones de habitantes es mucho sentirse. Y yo no he venido aquí a sentirme tanto. Ha sido un comienzo demasiado bueno. Yo quería un comienzo complicado: una casera gruñona, cucarachas en mi habitación, ratas asesinas y todo eso. Y a cambio me encuentro ratas burguesas, carestía de "cucas" y una compañera de piso de lo más nice que me lleva a fiestas nocturnas en el MOMA. Pero... que se va en agosto. Y luego está Mercedes, una chica ideal que ha decidido rehacer su vida en San Francisco. Lo cual -irónicamente- me recuerda a Curro. Bueno, todo está un poco conectado. Hoy no ha habido bares con nombre de padela pero ha habido risas y un ambiente cojonudo. Y me da pena que en agosto todo cambie. Que me invada una legión de germanas y arias cucarachas (aquí son rubias, como en El Boñar de León, paralelo a la Broadway madrileña) y que se vayan mis dos nuevas amigas neoyorquinas. La pregunta, al menos para mí, salta a la vista, como una bofetada en mi nueva alma prestada de los yankees. ¿Qué es realmente echar de menos? Supongo que como cualquier alma que está aprendiendo a manejarse entre sus nuevos sentimientos, he de aprender también esto. Porque.. ¿puedo realmente echar de menos desde ya mismo -y antes de que hayan partido- a dos personas de las cuales desconozco su color favorito, si conocen a Woody Allen, si son republicanas o demócratas, si votarían a Aznar o a ZP, si van a misa o por el contrario fingen los orgasmos...? (sí, estas dos últimas cuestiones son incompatibles). ¿Puede alguien echarme aún de menos aún habiendo pasado ya más de tres años sin vernos? ¿Puedo no echar de menos ni siquiera un poquito a algunas de las personas más importantes de mi vida?

En todo caso, ya se sabe, es la hora y este programa se llama Llorar por llorar. Seamos optimistas que en agosto viene una sueca. Y antes, uno que no está nada mal y que sabe hacerse muy bien el sueco. Eso espero, porque mi casera gruñona no es pero carácter tiene un rato. Dicho. Optimismo. Y si no, a recurrir a las sabias palabras de una famosa filósofa americana...:

"My loneliness is killing me and I, I must confess I still believe, When I'm not with you I lose my mind, Give me a sign, Hit me baby one more time".

0 Comments:

Post a Comment

<< Home