Friday, July 14, 2006

Al principio...


¿Y SI tras meses preparando el viaje de tu vida –tampoco es ir a la luna ni conocer a los bosquimanos del Calahari pero vaya, emociona- resulta que al dar el paso más importante, el del “un pequeño paso para el hombre pero un gran paso para… para el hombre también”, todo se desvanece y caes al vacío, y el avión no existe, y el vuelo 723 para Newark no aparece en la parrilla de vuelos? Una negrita maravillosa tras el mostrador de AENA te dice que tampoco existe. Sí, bueno, ha habido unos días agitados con esto de la huelga pero esa negrita, su cara te

lo dice, es incapaz de engañar a nadie, ni a un piloto de IBERIA siquiera. E incrédula y con unas ganas terribles por ayudarte, mira y requetemira en su monitor con la esperanza de haberse equivocado, deseando que exista ese vuelo 723 a Newark, porque el chico blanco de cara asustada seguro que se lo merece. Y al otro lado del mostrador, yo, pensando a triple velocidad, parpadeando a conciencia buscando qué pieza de mi operación ha fallado. Buscando una ayuda, pero a diez metros está mi padre con suficientes signos de nerviosismo ya, y eso que cree que el problema es, simplemente, que no encuentro la Terminal correcta. ¿Y si todo mi sueño se desvanece, simplemente, porque apunté mal el día, porque mi vuelo es de los de la huelga, porque todo era, simplemente, eso, un sueño? No pasa nada, todo el verano por delante. Todos mis amigos por delante. La piscina del Fresno y todo su "glamur", así, pronunciado en abulense, por delante. Eso seguro. Por delante, ellos. Y Curro. Y su boda. A no ser que…, a no ser que… mi vuelo sea el que vuela a Lisboa porque mi vuelo no es directo, joder, shit, claro que es a Lisboa, Y luego a Newark. Uffff. No pasa nada. Es que no he dormido. Nada. Ni una hora. Ni media. Too much exciting…

Y es que a veces los árboles no dejan ver el bosque. O al revés, el bosque no deja ver los árboles. Allá vamos, hacia el bosque de sequoias de hierro y hormigón armado. Atrás queda ya lejos el Bosco…

Así que accedo a Newark y todo comienza a ser más fácil, como si jamás hubiera abandonado esta ciudad desde que estuve aquí con Edu. Como si fuera de aquí y de ninguna parte, como lo es todo el mundo en Nueva York. Y si te notan que, de hecho, eres de alguna parte, y no perteneces a esto, a nowhere, y comprenden esa cara mitad asustado mitad "no sé qué hostias hacer ahora" te echan un cable. Como el tipo del metro que me ha invitado a al billete.

- Esto es algo embarazoso para mí, le digo.
- No te preocupes, tómatelo como mi bienvenida a Nueva York.

Luego me ha dicho que vivía cerca de la calle 74 en el East Side. Un puto rico, vaya. De hecho, tenía cara de famoso, un aurea especial de tipo especial. Así que le iba a preguntar si era Paul Auster o alguien así. Resulta que luego sabía algo de español, que fue piloto de Delta y que había estado muchas veces en España. Tal vez sea por eso lo del aurea, ahora que los pilotos son como putos dioses.

Y por fin llego a mi barrio, que no es precisamente el Olimpo de la limpieza y del confort. Y es que lo cool me tiene un poco despistado. Cómo puede ser cool un barrio lleno de ratas? O es verdad que las modas en Nueva York van tan deprisa que aquí las guías han de editarse cada mes..? Williamsburg, un barrio lleno de basura, ratas de alcantarilla y de un poco más arriba que la alcantarilla. Por suerte, aun no hay cucarachas, no estamos en temporada. Según me han dicho, esas llegan en agosto. Debe de ser la emigración. En el Bronx hace demasiado frío en agosto y se bajan para estos boroughs. Bueno, estaré preparado. De momento, me compraré unas martins para patear ratones. Para acabar, la casa y la habitación, predecibles, Un auténtico cuchitril. Lo del Johnny, para quien lo conociera, era el Waldorf Astoria. Además, algo sucio. Y me ha tocado limpiarlo con una especie de bayeta salida de un pack de los clic de Famobil (adjunto foto). En todo caso, esto tiene buena pinta. Comencé en barajas con mi primer ataque cardiaco ficticio del verano y ahora estoy con una bajada de tensión así que me voy a hacer un café. Yo, haciendo café. Las cosas cambian. Algo está cambiando Julitoooooo!!! ¿De qué me suena esa frase…?

1 Comments:

Blogger Unknown said...

jotaté? Amigo borracho? Auster? Tenemos mucho en común pero no sé quién eres!!!

De hecho te preguntan tanta estupidez que te vuelves algo gilipollas:

- ¿Tienes intención de trabajar en los EEUU? [y vaya, la verdad es que sí y no me parece nada delictivo pero comencé a sospechar de la pregunta, porque justo al lado preguntaban: - ¿has cometido alguna vez pederastia o piensas frecuentemente en los niños?] Y las dos preguntas, con una tercera más marciana aún, solo ofrecían como respuesta: Sí o No. Así que respondí NO, no por nada, pero es que no me sentía muy bromista esa tarde.

Hay algo más sobre atentar contra el presidente y sobre genocidios pero acabas por no prestar atención: NO NO NO NONNONONONONONO. Luego si al final matas al presidente creo que te caen dos o tres años más por mentiroso o te fríen con corriente alterna de menor potencia (a menor potencia, más tiempo de cocción...)

4:21 PM  

Post a Comment

<< Home